Es habitual ver gente con dolor en un hombro, pero no muchas personas conocen que ese dolor puede tener un origen en el cuello. Se recomienda antes de empezar a tratar un hombro valorar primero las cervicales para descartar que el problema venga de ahí. Todavía se pueden ver pacientes con muchas sesiones de fisioterapia centradas en el hombro, medicación pautada por médico, infiltraciones en hombro, etc… en las que su problema no mejora, pero que tras empezar a tratar las cervicales mejoran de manera inmediata. Muchos profesionales sanitarios reconocen que un dolor que empieza en cervicales y transcurre a lo largo del hombro, brazo y acabando en los dedos de la mano tiene un origen cervical. Pero sin existir dicha clínica, ¿cómo podemos sospechar que un dolor de hombro sea de origen cervical? Aquí dejamos varias pistas que debes tener en cuenta:
  • Reproducción del dolor en el hombro al mover el cuello.
  • Movilidad limitada del cuello. Puede ser la rotación más limitada a un lado que al otro, o la extensión o flexión cervical.
  • Tener dolor en el cuello con frecuencia.
  • Dolor o hormigueo en otras zonas hasta la mitad de la espalda, principalmente en la escápula.
  • Sensación de menos fuerza al hacer actividades cotidianas o adormecimiento del brazo, como por ejemplo al acostarse en la cama.
  • Aparición del dolor de hombro en una posición, como por ejemplo al estar un rato sentado en la oficina.
Existen más pistas, pero podemos decir que estas son las más habituales. ¿Y si tu fisioterapeuta y/o médico te asegura que el problema es de hombro porque te han hecho una prueba radiológica (ecografía, resonancia, radiografia) y se ve una lesión? Puede ser, pero a día de hoy sabemos que una lesión en el tejido no se corresponde siempre con el dolor que uno puede tener. Es decir, si cogemos por ejemplo 100 personas sin dolor de hombro y les hacemos las mismas pruebas, la mayoría también tendrán lesiones sin haber sufrido nunca dolor en el hombro (existen muchos estudios así). Con este artículo queremos mostrar que hay muchos cuellos que se disfrazan de hombros. Una buena valoración inicial es fundamental, ya que puede ayudar parcialmente o totalmente a la recuperación del dolor de hombro, mejorando el tratamiento y optimizando las sesiones de fisioterapia.